1. Conduzca su unidad a velocidades moderadas
Dada las características de sus componentes, su Sierra le proporcionará un mayor rendimiento cuando conduzca a velocidades moderadas. Evite en lo posible la marcha prolongada a altas velocidades. Tanto velocidades reducidas como las excesivas, resultarán perjuciciales para su unidad, aumentando el consumo de combustible y lubricante, en proporción a las exigencias fuera de los regímenes normales.

2. No conduzca variando la velocidad en forma rápida y continuada
Las variaciones rápidas de velocidades, producidas por aceleraciones y desaceleraciones violentas del motor, reducirán el rendimiento de la unidad, aumentando el consumo de combustible y lubricante.

3. Evite el funcionamiento del motor en marcha lenta
En esta condición se elevará notablemente el consumo de combustible. Por tal motivo, cuando la unidad debe permanecer detenida por períodos de tiempo relativamente prolongados, detenga también la marcha del motor.

4. No saltee los cambios de velocidad
Inicie la marcha siempre conectando la primera velocidad. No acelere excesivamente en esta condición, tratando de evitar el empleo de las velocidades intermedias, pues ello redundará en un excesivo consumo de combustible y posible deterioro del sistema de transmisión.
El buen uso de las distintas relaciones de la caja de velocidad, se traducirá en respuestas suaves y eláticas del vehículo.

5. Inicie la marcha a velocidades moderadas hasta que el motor adquiera la temperatura ideal de funcionamiento. Evite mover la unidad segundos después de arrancar. Espere al menos de entre 3 a 5 minutos, piense que el mayor esfuerzo de desgaste de la planta motríz se produce al momento del arranque. Si usted le imprime un trato exigente al momento de arranque provocará un incremento notable en el consumo de combustible y lubricante.

6. Conduzca con la presión de neumáticos adecuada, para evitar un desgaste prematuro de los mismos y un aumento en el consumo de combustible.